La congelación de la marcha en el Parkinson es uno de los síntomas más incapacitantes de esta enfermedad. Esta limita la movilidad, mayor lentitud y un acortamiento de la longitud de los pasos, hasta incluso la congelación de la marcha, que suele ser una repentina incapacidad de dar un paso o iniciar la marcha.
¿Qué es el Parkinson?
El Parkinson es una enfermedad neurodegenerativa debida principalmente a la degeneración de los ganglios de la base del cerebro y a la afección de la transmisión de la Dopamina, lo que implica que exista una gran dificultad para realizar movimientos y secuencias motoras automatizadas, como es el caso de la marcha.
¿Qué estrategias se pueden seguir para compensar la congelación de la marcha en la enfermedad del Parkinson?
Hay muchas estrategias compensatorias para la congelación de la marcha, entre ellas podemos destacar:
- El uso de estímulos externos: Esto se basa principalmente en la utilización de estímulos auditivos, sensoriales o visuales para facilitar la secuencia motora de la marcha. Los estímulos visuales favorecen la producción del movimiento y además ayudan a corregir la amplitud del paso, mientras que los auditivos facilitan la sincronización de la marcha y la coordinación de las extremidades.
- Uso de estímulos internos: Este trastorno se debe principalmente a la dificultad para realizar movimientos automatizados es por ello que los estímulos internos consisten en ser conscientes del momento del movimiento, pensar en él y prestarle atención.
- Imaginación de la marcha y observación de la acción: La imaginación humana tiene mucho poder, tanto es así que mientras nos imaginamos haciendo cualquier movimiento, se activan las mismas áreas del cerebro que cuando estamos realizando ese movimiento, es decir, para el cerebro es como si lo estuviésemos realizando de manera real. Este fenómeno también sucede cuando observamos a alguien haciendo un movimiento, gracias a nuestras neuronas espejo. Para las personas con enfermedad de Parkinson, implica que se puede ejercitar la marcha sin realizar movimiento alguno.
- Alterar el estado mental: Esta estrategia se basa en el fenómeno de cinesia paradójica, que se define como la habilidad repentina y transitoria de las personas con Parkinson de realizar movimientos que normalmente no pueden, cuando se enfrentan a un riesgo inmediato. El ejemplo más clásico es cuando personas con Parkinson que tienen dificultades en andar, pueden hacerlo perfectamente durante un terremoto. Obviamente, esta estrategia no se puede realizar en la vida diaria, pero explica que cuando hay un mayor nivel de activación y de motivación es probable que facilite la realización de los movimientos problemáticos
- Adoptar nuevas formas de caminar: Debido a que no seremos capaces de realizar los movimientos automatizados con esta enfermedad. Se ha demostrado que si utilizamos el aprendizaje de una nueva forma de caminar conseguiremos hacerlo. Por ejemplo caminar levantado las rodillas más de lo normal, andar como si estuviera patinando sobre hielo.
Por tanto, si tienes alguna persona que padezca la enfermedad del Parkinson, ya sabes cómo son las estrategias compensatorias para el control de la marcha.