La atención personalizada permite que una persona mayor, un discapacitado o una persona enferma reciba toda la atención y los cuidados que su situación específica requiere.
Cada persona puede necesitar determinados cuidados específicos dependiendo de su estado físico, mental y su salud general. Para que tenga cubiertas sus necesidades es necesario crear y diseñar un plan de trabajo específico y personalizado para ella. En este plan de atención personal se pude incluir asistencia en muy diversos aspectos dependiendo del grado de disminución de la autonomía de la persona y su movilidad para desarrollar sus actividades diarias:
- Cuidados personales: asistencia para vestirse y asearse.
- Asistencia para comer o elaborar comidas saludables adecuadas a la persona que se asiste.
- Ayuda en las labores del hogar.
- Acompañamiento y asistencia para traslados, paseos, visitas al médico, etc.
- Acompañamiento durante las noches para personas dependientes.
- Cualquier situación que requiera de asistencia y cuidados específicos.
La atención personalizada puede realizarse desde simplemente unas horas al día para actividades concretas hasta un servicio de 24 horas del día; lo importante es que la persona reciba durante este tiempo un servicio específicamente diseñado para ella y sus necesidades concretas.
¿Qué incluye una atención personalizada para para discapacitados, ancianos o personas enfermas?
- Establecer un plan de trabajo específico para ella en función de sus necesidades concretas. Esto se realiza en colaboración con la propia persona asistida y en su caso con los familiares.
- Actuaciones específicas en función del plan de asistencia establecido.
- Seguimiento de la evolución de las necesidades y modificación en función de las mejoras o los cambios en su situación.
Para una correcta atención personalizada es fundamental contar con personal cualificado
La atención personalizada para discapacitados, ancianos o personas enfermas requiere de una preparación profesional y conocimientos específicos para tratar y cubrir correctamente las necesidades de estas personas. Dentro de esta cualificación profesional también se incluyen habilidades personales para tratar a las personas mayores o enfermas que puedan tener sus capacidades físicas o psíquicas disminuidas; así como habilidades sociales para comunicarse efectivamente con los familiares que convivan con la persona asistida o que estén a cargo de ella.
La atención personalizada permite mejorar la calidad de vida de la persona asistida y de sus familiares. Para ello es fundamental que se realice por cuidadores con la correspondiente capacitación profesional y las habilidades personales adecuadas para llevar adecuadamente un trabajo asistencial.